Alicia Esteve Head era
alumna de un Máster de Negocios en Barcelona, cuando vio en la televisión el
escalofriante ataque a las Torres Gemelas. Conmovida, abrió una website en inglés para solidarizar con los afectados.
Por esos rompecabezas del destino, la joven (bajo el pseudónimo de Tania Head)
se convirtió en la anfitriona de las noticias, lazos de unión, búsqueda de
desaparecidos, mensajes y el principal foco de reunión para los sobrevivientes
y familiares. Fue entonces, cuando los usuarios del portal le preguntaron quién
era ella y su relación con el 9/11. ¿Qué respondió?
La tentación de ser protagonista
Alicia debió dudar.
En el 2001 se vivía en internet el auge de los juegos de alter ego en segundas
realidades. Ella era hija única, sufría ansiedad, sobrepeso y una autoestima
baja. Compensaba sus carencias emocionales con éxitos académicos. Sufría por no
tener amigos ni ser popular. ¿Para qué defraudar a sus admiradores
norteamericanos?. Inventó una pequeña “mentira blanca”. Dijo ser la prometida de
David X, un ejecutivo soltero fallecido en la Torre Norte. Las condolencias y
simpatías aumentaron; también las preguntas. ¿Qué hacía Tania el 9/11?
Crece la “bola de nieve”
La “mentirita”
creció. Relató que ella y David se habían conocido en España, que estaban muy
enamorados y que la semana de la tragedia ella se encontraba en Manhattan,
concretando los detalles de la boda. Agregó que la mañana fatal, ella estaba en
la Torre Sur, en la entrevista laboral de una prestigiosa firma. Su actitud
ante el dolor hizo que su website fuese la voz oficial de los sobrevivientes.
Se llamó Trade Center Survivor Network y formaron la primera agrupación oficial.
Alicia declinó la presidencia, pero como secretaria construyó una excelente relación
con las autoridades, donantes y sobrevivientes. Se cubrió las espaldas, contando
a sus compañeros de universidad que había viajado a New York durante la semana
del 9/11 y que su novio americano había muerto allí. Un relato casual, destinado
a quienes hallaran su portal y reconocieran sus fotos.
El sabor de la felicidad
Agradecidos, los
asociados le consiguieron un empleo en New York y la ayudaron en la adaptación
a su nuevo país. La depresiva joven saboreaba un sueño maravilloso: ¡Era amada
y valorada por todos!. Durante tres años, la española siguió inventando detalles. Llegó a ser la única sobreviviente
que se había encontrado (en su escape de la Torre Sur) con numerosas víctimas.
Ella había recibido el anillo de un hombre que le pidió entregarlo a su esposa.
También, dijo haber sido ayudada en el hall por el bombero-mártir más famoso de
todos. Como prueba, ella mostraba una cicatriz que tenía en el brazo, producto
de un accidente automovilístico en Barcelona.
El cuento de hadas se desmigaja
Los primeros en sospechar fueron los padres de David X. Después de muchas negaciones, la “sobreviviente
estrella” aceptó ir a la casa de sus “suegros”. Se puso nerviosa porque los
datos no calzaban. David jamás había estado en España, donde según ella, se
habían conocido. Inventó a última hora, que se habían visto por primera vez en
unos cursos de negocios en Harvard y Stanford. Los padres del joven se quedaron
con la impresión de que Tania era una triste enamorada sin suerte, ya que
David les había presentado a su novia real días antes del 9/11. No dudaron eso
sí, del resto de la historia. Desde esa visita, Alicia apeló a problemas
psicológicos para no tener que enfrentar a los familiares de las víctimas.
Incluso, dijo haber perdido el anillo mencionado, cuando la esposa del
fallecido quiso recuperarlo. Varios de los sobrevivientes sufrían el síndrome
post traumático, por eso, no encontraron muy extraña la conducta de su líder.
“La mujer que no estuvo aquí”
Con la estrategia
del “bajo perfil” Tania Head duró seis años en la directiva de la
organización. Su gran desplome ocurrió cuando Angelo J. Guglielmo Jr. quiso
filmar un documental, entrevistando a los seis más importantes testigos del
9/11. La española figuraba en el primer lugar con su novelesca historia. Aunque
ella se negó, apelando al síndrome post traumático, el comunicador quiso
incluir, al menos, su biografía. Así, se contactó con los padres de David X,
quienes le manifestaron su opinión sobre la falsedad de la relación amorosa.
Guglielmo descubrió que Tania era un pseudónimo y que no figuraba en los
archivos de Harvard ni Stanford, como tampoco, había ingresado a los Estados
Unidos durante la semana de la tragedia. En Barcelona, contactó a testigos que
acreditaban lo del viaje y del novio americano, pero muchos otros, la habían
visto en la ciudad los días 10 y 11 de Septiembre.
La verdad estalló como
una bomba. Guglielmo cambió el guion y junto a la periodista Robin Gaby Fisher transformó
su investigación en un libro y en el documental titulado: “The woman who wasn’t
there: The true story of an incredible deception” (La mujer que no estuvo allí:
La verdadera historia de una increíble decepción). La revelación provocó el
cierre del sitio web y conmoción en la prensa. Tania Head envió un último email, señalando
su frustración ante los miembros que
habían creído en las "mentiras del periodista". Anunció que se suicidaría, hecho
que no ocurrió. Debido al gran trabajo que había realizado, no le hicieron
cargos ni juicios. Simplemente, desapareció de la vista pública. Fue vista un
par de veces con su madre en New York y se sabe que sigue en España con otro
nombre. En el libro, diversos psicólogos
estiman que Alicia tal vez sufría de histrionismo o de un trastorno delirante que
la hacían confundir la fantasía con la realidad. Alicia Esteve jamás quiso contar su versión de
los hechos.
(María del Pilar
Clemente B.)